Mentiras por petróleo


Bombardeo sobre Libia

06 de marzo del 2011

Tres fuentes distintas desmintieron la noticia. Fue tapa, en letras de molde: el ejército libio bombardeó manifestaciones en Trípoli y Benghazi. Pero el Estado Mayor ruso, el embajador de Brasil en Libia y el enviado de Telesur en ese país lo negaron rotundamente. ¿Entonces?

La información fue ampliamente difundida por los medios de comunicación corporativos: un cruel dictador lanzó sus aviones y sus bombas contra la población civil para defender sus privilegios. Pero buceando en otros medios de comunicación, la misma información fue enfáticamente desmentida.

La campaña occidental es sencilla: lo que pasa en Libia es lo mismo que ocurrió en Egipto,Túnez o Barheim. Miles y miles que se hartaron de sus mandatarios, de la falta de democracia, de la falta de empleos. Podridos de una vida de privaciones.

Pero no es lo mismo.

En Libia hay mucho petróleo. Por eso las flotas norteamericanas vigilan de cerca. Por eso el apetito occidental. Necesitan el bendito oro negro. Hambrientos. Por eso la política de Washington en la región tiene solo dos aristas: el petróleo y los intereses de Israel.

Aquí entra en juego la necesaria campaña de demonización contra Muamar Kadafi, para mostrar solo el lado de la Luna que le conviene y expandir el silencio sobre los avances conquistados por el gobierno libio en múltiples áreas sociales. Kadafi también nacionalizó en los 70 los recursos económicos, naturales y financieros de ese país del norte de Africa. Es cierto también que sus últimos pasos han sido erráticos y ha mutado sus alineaciones políticas de manera alocada. Entre esas mutaciones está -a pesar de su perfil antiimperialista- su asociación con Tony Blair y Silvio Berlusconi.

Pero nada de eso -ni las razones a favor o en contra- permite inventar noticias. Hoy Libia vive una revuelta innegable entre quienes pretenden quitar del poder a Kadafi y quienes reclaman su permanencia. Desde esta distancia no sería justo decir que hay verdades absolutas. Pero Libia no es Egipto. Kadafi, a diferencia de Hosni Mubarak ha dicho que morirá en tierra libia, en su patria. Los medios, en otro intento de demonización, repetidores del berretín de las administraciones norteamericanas, el famoso eje del mal, dijeron que el líder libio se refugió en Venezuela. De paso, como golpe de carambola, se le pega a Hugo Chávez.

Respecto a la noticia de las bombas, las primeras informaciones de las agencias internacionales de noticias hablaron de “bombardeos contra civiles” sobre Trípoli y Benghazi. Sin embargo, el embajador de Brasil en el país, George Ney de Souza Fernandes, informó que “no hubo bombardeo sobre Trípoli. Eso fue un bombardeo noticioso da Al-Jazeera”. Contundente.

El periodista y analista brasilero, Leonardo Severo, alega: “Tanto Al-Jazeera como la CNN están en campaña por la vuelta de la monarquía al país, entrevistando un príncipe y a otros demócratas de letrina”.

Como informó la comentarista de la TV Rusa, Irina Galushko: “Rusia monitora los acontecimientos en Líbia, desde su inicio, vía satélite, y afirma que los bombardeos aéreos alegados por las redes Al Jazeera, BBC y otras contra las ciudades de Benghazi y Trípoli nunca ocurrieron”.

“Informes del Estado Mayor del Ejército dan cuenta de que algunas informaciones difundidas por la prensa occidental no corresponden a las fotos tomadas por los satélites”. Habrá entonces que preguntarles a esos medios cuáles han sido las fuentes calificadas que han hablado de las bombas.

Jordan Rodrigues, enviado de Telesur a Trípoli también denunció las falacias en la cobertura de los medios internacionales. “La cobertura de los grandes medios de comunicación sobre el conflicto en Líbia han sido miserables”, subrayó.

El reportero realizó “varios recorridos – cámara en mano- por Trípoli, en ellos se demuestra que no hubo bombardeos y que los comercios están abiertos, eso tampoco ha sido divulgado por las redes de televisión”.

¿Se puede inventar un bombardeo? En tiempos de cámaras en celulares ¿cómo no hay imágenes de algo que asemeje a un avión tirando una bomba?

Estoy perplejo.

¿Es posible inventar que se bombardeó a un pueblo solo para que Estados Unidos pueda apropiarse de las incontables reservas petroleras de Libia?

La respuesta, sin duda, es sí. Geroge W. Bush ya inventó que había armas de destrucción masiva para invadir a Irak.

Más vale aguzar la mirada.

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categoría: mundo